Hechos indicativos de una situación de quiebra. Mientras unos nos conducían a ella y otros silenciaban su caótica gestión, se iba orquestando el actual plan de desestabilización del Estado ante el más que previsible cambio de gobierno. Producido éste, todo se enfoca, ahora, a desgastar gobiernos que, equivocadamente o no, al menos se atreven a tomar medidas, por muy impopulares que éstas sean. Las organizaciones que están por la tarea desestabilizadora lo subordinan todo a incrementar su capacidad de convocatoria y a la movilización permanente de la ciudadanía. Septiembre y Octubre quedan a la espera de lo que monten los sindicatos. ¡Patético y autodestructivo!
Manipula y falsea, que siempre habrá pardillos que se lo crean
En los años 60 y 70 del siglo pasado, Cataluña, la gran protegida del franquismo, era el destino prioritario de las empresas extranjeras cuando invertían y se instalaban en España. En las décadas anteriores, un buen número de empresas nacionales situaron sus instalaciones preferentes en Cataluña. Una inversión que comportó una enorme masa monetaria y grandes desplazamientos de población desde otras zonas de España, en donde se alimentaba y preparaba a sus hijos para que, una vez alcanzada la edad productiva, pudieran ir a trabajar y generar beneficios para Cataluña. La Universidad en Barcelona concentraba un buen número de facultades y escuelas universitarias cuya implantación era denegada a otros distritos universitarios. Esto representaba mayores inversiones en Cataluña y la transferencia de dinero de familias del resto de España para el sostenimiento de la educación de miles de alumnos que, cada año, acudían al distrito universitario catalán.
El ingreso en la Unión Europea significó, por imperativo legal, el fin del proteccionismo a una Cataluña, que ha ido viendo como los inversores internacionales se orientan hacia otros lugares de España, especialmente la comunidad de Madrid, que cuadruplica ya a Cataluña en esta materia.
Enrocado en la bandera y sin el más mínimo ejercicio de autocrítica, el nacionalismo catalán se radicaliza y tensiona la situación con permanentes incertidumbres políticas y enfrentamientos directos con el Estado. Y del paraíso independentista se alejan las inversiones y solamente se acercan los inversores especializados en pirulas como el pelotazo inmobiliario. En este sentido, la lista de los asistentes a la presentación del proyecto de Barcelona World es bien significativa.
Por eso, me resulta inaudito el análisis macroeconómico de un eminente economista como Xavier Sala i Martín, el catedrático de economía de la Columbia University, nacido en Cabrera de Mar (Barcelona) y de nacionalidad estadounidense, que nos descubría que “si Cataluña fuera independiente, sería una de las economías más sanas del mundo y los mercados se pelearían por prestarle dinero”. Este articulista y tertuliano de radio y televisión, cerebro económico del Barça de Laporta, argumentaba que Cataluña tiene el mercado cerrado “porque forma parte de España”, y ponía el ejemplo de la empresa Gas Natural, que dice es penalizada porque "asocian la empresa con España". Para el profesor Sala, el desastre económico y el endeudamiento de Cataluña, que dificulta su acceso al crédito, sólo ha sido culpa del tripartito catalán. Para él, Pujol y sus clanes despilfarradores no han tenido nada que ver en estos 32 años de taifa nacionalista, visceral y sectaria, años de victimismo y de correas de transmisión cultural, económica, política, sindical o social millonariamente subvencionadas.
Elude Xavier Sala que, por ese extraño pacto de solidaridad gansgteril que funciona por estos pagos, Gas Natural actúa, en la práctica, como un monopolio, cuyos ingresos provienen de cobrarles el gas a los españoles al precio más elevado de Europa, entre un 20 y un 40% más, sin que la Justicia y los organismos de control actúen para frenar el atropello. Sin duda, en una situación de independencia, Gas Natural conseguiría importantes pérdidas.
Como ya es tradicional, el nacionalismo catalán y el profesor Sala culpan a Madrid y a España de todo, evitando así plantearse cuestiones como el nepotismo, el despilfarro, la incompetencia, el descontrol o la corrupción generalizada y transversal que ha implicado en múltiples casos a CDC, UDC, PSC, ERC e ICV.
Sede de Standard&Poors, agencia de rating que marca muy de cerca el riesgo de España y de sus comunidades autónomas.
Silencia Sala y Martin, el profesor convertido en gringo, que la Formación del Espíritu Nacionalista (FEN) de estos 32 años y que la intervención de todos los clanes nacionalistas y tripartitos, con sus sagas familiares, amantes, amigos y conocidos, han conducido a Cataluña a la presente quiebra moral y económica, y han dejado su deuda a nivel de bono basura. De acuerdo con los informes de las agencias de rating Moody´s y S&P, “el profundo deterioro económico y crediticio de la región, y la incertidumbre que generan las tensiones con el Gobierno” motivan tal calificación.
La Cataluña del conglomerado lucrativo conformado estos años, se ha fundido cuanto ha ingresado y ha vivido de subvenciones y créditos, que le han permitido desviar, con esmero, cuanto ha podido hacia arcas particulares, paraísos fiscales y toda clase de chiringuitos, entes y empresas públicas creadas para colocar a dedo a los de su casta parasitaria.
Analizan las agencias citadas la inviabilidad de una Cataluña independiente, que “por su debilidad económica individual no podría superar el non investment grade”; es decir, que, por ejemplo, las multinacionales instaladas en ella están ahí, precisamente, para abastecer España, puesto que, en otro caso, se marcharían todas. En su inédito informe continúan: “los mercados están descontando un mayor riesgo de Cataluña que del propio Estado; en parte es por la situación general que afecta a todo el país, pero la otra parte, un 50%, se explica sólo por el riesgo adicional intrínseco a la región”. Para los analistas internacionales, “Cataluña y otras regiones similares son las que elevan el riesgo de España y no al revés”. Concluyen que: “en el caso de que Cataluña lograra incrementar su participación en los ingresos nacionales, los beneficios de la región irían en detrimento de otras regiones u otros niveles de gobierno”.
Por su parte, Durao Barroso ha querido dejar claro que “Fuera de España no hay Europa”, ya que es norma comunitaria que “Un territorio que se escinda deja de pertenecer a la UE". Repasen los casos europeos de escisión, y podrán comprobar cómo la parte escindida se ha empobrecido. Bancos, empresas y productos pierden el que era, hasta entonces, su mercado económico natural. Además, en caso de secesión, Cataluña debería asumir el pago de más de 200.000 millones de euros, que es su cuota participativa en la deuda de España.
¿Olvidan, acaso, los nacionalistas que los impuestos los pagan las personas y no las Comunidades Autónomas y que, a excepción del régimen foral del País Vasco y Navarra –tan vilipendiado por el nacionalismo catalán en su momento- y del sistema especial de Canarias, al resto de los españoles se les aplica la legislación tributaria común? No obstante, las propias comunidades pueden establecer sus tramos impositivos.
El mito del expolio es otra falacia más del nacionalismo que le permite tergiversar la realidad y fundamentar su victimismo, y centrarse en el autoengaño de “sus balanzas fiscales”, elaboradas con cálculos tramposos y maquilladas de forma contable. Ni los estados norteamericanos, ni los landers alemanes o los cantones suizos encuentran sentido alguno a esas comparaciones. Pero, los nacionalistas se aferran a esta cantinela.
En la balanza fiscal de 2009, el último ejercicio del que existen datos, la Generalitat aducía una diferencia negativa de más de 16.409 millones de euros (-8,4% s/PIB) de acuerdo con su especial método de flujo financiero neutralizado. Pero, según el método de carga-beneficios real, el saldo fiscal real es netamente positivo y por un importe de 4.015 millones de euros (+ 2,1% s/PIB), desglosado de esta forma: el Estado gastó en Cataluña 49.199 millones de euros y recaudó 45.184 millones de euros. Un superávit del 8,8% que se dividió en partes muy similares entre superávit en la Seguridad Social (4.1% o 1.890 millones de euros) y gasto del resto del aparato del Estado en Cataluña un 4.7% (2.125 millones de euros).
En su cálculo, la Generalitat maximiza el saldo fiscal negativo de Cataluña introduciendo criterios no objetivos y ocultando aquellos datos que son contrarios a sus intereses políticos. Infla el saldo fiscal mediante el empleo de técnicas como:
• Metodología inadecuada, con técnicas muy discutibles como la del flujo monetario, del que oculta su valor real, introduciendo un componente ficticio denominado “neutralización” que maquilla los datos obtenidos.
• Maximización de los ingresos de Cataluña hacia el Estado.
• Minimización de los gastos del Estado en Cataluña.
• Inclusión del déficit fiscal con Europa en el del Estado.
• Incorporación de partidas y un marco de contabilidad no adecuados.
El gobierno catalán incluye entre los “impuestos pagados por los catalanes al Estado” los siguientes conceptos:
• Los impuestos sobre la renta generada en Cataluña por ciudadanos no catalanes.
• El IVA pagado en Cataluña por no residentes en Cataluña.
• Impuestos sobre el alcohol y bebidas pagados en Cataluña por no residentes en Cataluña.
• Impuestos sobre el tabaco pagados en Cataluña por no residentes en Cataluña.
• Cotizaciones sociales a la Seguridad Social de empleados, residentes en Cataluña o no, cuyo centro de cotización está en Cataluña.
En la imputación del Impuesto de Sociedades (IS), con su método de flujo monetario neutralizado, la Generalitat considera que este impuesto sólo recae en los accionistas en función del indicador EBE (Excedente Bruto de Explotación= valor añadido bruto – suma remuneración asalariados y impuestos netos sobre producción). Una ratio de EBE de Cataluña superior al ratio de consumo de Cataluña, que presenta un nivel más lineal entre las diferentes comunidades autónomas. La manipulación del aumento del volumen de ingresos e impuestos aportados por catalanes, trae como consecuencia el aumento ficticio del déficit fiscal “sufrido por los catalanes”.
Sin embargo, en contra de la mayoría de los estudios, el gobierno catalán no traslada de modo alguno el IS a los consumidores en función de un indicador de consumo. Una forma de imputación de impuestos que impide conocer de manera objetiva cuál es la carga real que soportan los ciudadanos de Cataluña.
En otro orden de cosas, en ocasiones, municipios turísticos, como el de Torredembarra, aprueban bonificaciones del 50% en las tasas municipales para los empadronados, mientras que los propietarios de segundas residencias, un buen número de ellos residentes fuera de Cataluña, deben pagar su totalidad por más escaso que sea el uso de esos servicios.
El Govern, reduce lo invertido por el Estado en Cataluña de 7.118 a 3.268 millones, como muestran los datos de “Resultados de la balanza fiscal de Cataluña con el sector público central 2006-2009”. Una manipulación que conduce a un incremento artificial del déficit fiscal de Cataluña de 3.850 millones de euros en el ejercicio 2009, ya que reduce al mínimo los gastos del Estado imputables a Cataluña en materias de defensa, de gestión administrativa, de intereses de la deuda, de justicia, de política exterior, de servicios sociales, de organismos públicos.
A pesar de gastar parte sustancial de su presupuesto en Cataluña, por no tener su sede en su territorio, el gobierno catalán no imputa ni un solo euro de gasto en Cataluña en más de 30 organismos del Estado. Veamos algunos de estos organismos:
Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios
Agencia Española de Protección de Datos
Agencia Española de Seguridad Alimentaria
Agencia Estatal del Boletín Oficial del Estado (BOE)
Agencia Estatal de Evaluación de la Políticas Públicas y la Calidad de los Servicios
Agencia para el Aceite de Oliva
Centro Español de Metrología
Centro de Estudios Jurídicos
Centro de Estudios Políticos y Constitucionales
Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas
Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas
Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS)
Centro Nacional de Información Geográfica
Comisión Nacional de la Competencia
Comisionado para el Mercado de Tabacos
Consejo Económico y Social
Consejo de Seguridad Nuclear
Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas
Instituto de Estudios Fiscales
Instituto de la Juventud
Instituto de la Mujer
Instituto de Turismo de España
Instituto Español de Oceanografía
Instituto Geológico y Minero de España
Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria
Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial
Instituto Nacional del Consumo
Oficina Española de Patentes y Marcas
Organización Nacional de Trasplantes
Como antes hiciera Jordi Pujol y el tripartito, el gobierno de Artur Mas utiliza el argumento del déficit fiscal en función de sus intereses políticos y como filón electoral. Un objetivo demagógico que exagera, infla y oculta información, datos y saldos fiscales a la opinión pública. Así no puede extrañar que el gobierno catalán oculte la sub-balanza fiscal de la Seguridad Social, que hasta fechas recientes había presentado en sus informes.
En sus cálculos de distribución de sus inversiones dentro de Cataluña, el gobierno catalán no aplica los criterios que exige al gobierno central, al invertir en Barcelona por debajo de su contribución al PIB de Cataluña. Si Barcelona genera el 75% del PIB de Cataluña y recauda el 79% de los impuestos, la Generalitat sólo invierte en ella el 66% de sus inversiones y dispara su déficit fiscal. De nuevo, la realidad se topa con el discurso nacionalista, puesto que la Generalitat no invierte en las demarcaciones catalanas ni en función del PIB, ni del déficit fiscal ni de la población.
Así, pues, el engañoso efecto propagandístico de las balanzas fiscales sólo alcanza a los convencidos ideológicamente. Mas, si se quiere interpretar la realidad, se han de considerar también las balanzas comerciales y las de ahorro-inversión. Para la mayoría las tres balanzas son indisolubles, no así para los nacionalistas.
¿No les resulta extraño que el Govern eluda hablar de las balanzas comerciales con el resto de Comunidades Autónomas? ¿Será porque Cataluña vende más de dos tercios de lo que produce en el resto de España? ¿Será porque eso, en 2010, representó un superávit de 25.000 millones de euros?
De momento, en 2012, Cataluña es ya un pozo sin fondo, el Govern de la Generalitat se ha fundido los 5.100 millones de euros entregados en concepto de adelantos de transferencias del Estado. Sin olvidar los 5.023 millones anunciados del rescate, o los 4.500 millones para rescatar Catalunya Caixa, o los 7.900 millones para la protección de activos del Banco Sabadell. Unnim que, como medidas de rescate por capitalización, había recibido del FROB 380 millones en marzo de 2010 y 538 millones en marzo de 2011, ha recibido, en estimación de la Comisión Europea, una ayuda estatal más de 2.869 millones de euros. También, se deberían sumar los más de 2.000 millones de euros otorgados para compensar el déficit de la Seguridad Social en Cataluña.
Descubierta la falsedad de sus razonamientos económicos, y con buena parte de sus dirigentes inmersos en procesos judiciales que ponen en entredicho su honra, el nacionalismo catalán ha optado por el enfrentamiento, por la amenaza de la independencia y por una acción callejera que sirva de parapeto a sus desmanes. Manifestación que el nacionalismo pretende multitudinaria, organizándola desde las instancias del poder sin escatimar el más mínimo gasto, superando con creces a la antigua usanza del franquismo, con campañas en los medios de comunicación públicos y subvencionados, con traslados subvencionados por ayuntamientos, consejos comarcales e instituciones diversas.
¡Enrocarse en la bandera ha sido la sempiterna autodefensa de estos pillos! Es innegable que, desde los tiempos de Banca Catalana, el nacionalismo catalán ha probado todas las formas posible de pillaje.
De pillos es el pillaje
En 1996, en la primera sanción en la historia del Parlamento andaluz, Sánchez Gordillo fue sancionado con un mes sin sueldo por el cobro irregular, durante año y medio, de dos sueldos: uno como profesor de EGB en servicios especiales y otro como parlamentario andaluz de 1994 a 1996. A pesar del voto particular del presidente de la Comisión del Estatuto de los Diputados del Parlamento andaluz, Diego Valderas, de IU, que propuso un apercibimiento por negligencia, la sanción contó con el voto favorable del PSOE, PP y Partido Andalucista. Si bien el alcalde de Marinaleda la consideró injusta y argumentó que no se dio cuenta de que estaba cobrando dos sueldos y que “sin conocimiento no puede haber omisión”. Este episodio consta en el diario de sesiones y fue citado por El País.
El alcalde de Marinaleda y Diputado comunista en el Parlamento Andaluz y alma del Sindicato Andaluz de Trabajadores, Juan Manuel Sánchez Gordillo, se está fabricando una aureola de Robin Hood, de Salvador del Valle del Genil, reconvertido en un Gandhi que se implica en la agitación social y da lecciones de honradez, solidaridad con los pobres y de no violencia. No obstante, es incapaz de impedir las amenazas, coacciones y agresiones de sus partidarios, con las que han envuelto los pillajes en supermercados, las ocupaciones de bancos y de fincas, recogidas por las cámaras de televisión que han grabado sus caminatas por diversas provincias españolas. Acciones que han sido jaleadas por IU, PSOE, UGT, CCOO y otros.
Desaparecido uno de sus apoyos más firmes, el coronel libio Muammar Al Gadaffi, Sánchez Gordillo corrió raudo a visitar a Hugo Chávez en Venezuela, realizando el vuelo transoceánico en clase Business, acompañado de su inseparable kufiya (pañuelo palestino), para presentarle sus respetos y exportar el modelo del Cortijo El Humoso en Marinaleda.
Entrada al cortijo El Humoso, con las consignas de viejo estilo preñadas de ilusiones
Marinaleda, cuenta con 2.778 habitantes y una población activa de 1.128 personas, 154 de ellas en paro en julio del 2012, que representa una tasa de paro del 13,65 %. Los niños, jóvenes y ancianos que pasean por sus calles representan el 40,61% de la población. Su motor económico lo constituye la Cooperativa Humar - Marinaleda S.C.A, constituida en 1992 para gestionar el Cortijo El Humoso, una finca de 1.200 has, conseguida en 1991 por la Junta de Andalucía, emplazada en el término de Écija, a 11,5 km. de Marinaleda por la carretera A-388. El cortijo fue cedido en uso a los jornaleros en paro de Marinaleda y daba ocupación a 400 personas, que iban rotando para que todos pudieran cobrar algo. En enero de 2012, el SAT reconocía que proporcionaba 300 jornales diarios, que cobraban dos euros por encima del convenio del campo. Sin embargo, maquinas sustituyen, poco a poco, a los jornaleros.
Cooperativas agrarias, y una de transformación, laboran en sus campos de regadío y completan sus labores con el olivar y los invernaderos y semilleros, en los que cultivan durante todo el año productos como la lechuga y el tomate. Una fábrica de conservas vegetales envasa pimiento de piquillo y morrón, alcachofas y habas, proporcionando trabajo, en especial, a las mujeres. La aceituna se recolecta a mano y se elabora artesanalmente en las variedades de arbequina, marteño y hojiblanco. Una almazara produce aceites de oliva virgen extra, variedad Arbequina, Picual y Hojiblanca, bajo la denominación "Cortijo El Humoso". Dispone de una cabaña de ganadería ovina. Toda su producción está certificada.
Para el ejercicio de 2012, el presupuesto municipal de Marinaleda ha sufrido un drástico recorte y prevé ingresos de 2.729.000 euros, de los que el 33% se obtendrán vía impuestos y tasas, y el resto mediante subvenciones de la Junta de Andalucía y del Gobierno. Ayudas que permiten a Marinaleda disponer, a precios muy inferiores a su coste real, servicios de colegios, guarderías a 12 euros, Casas de Cultura, Televisión Local, un parque de 55.000 metros cuadrados, un anfiteatro con capacidad para 1.500 personas, dos campos de futbol (uno de ellos con hierba natural), gimnasio, pistas de padel y de tenis, polideportivo, piscina (cuyo bono anual cuesta 5 euros). Trescientas viviendas de autoconstrucción a base de materiales subvencionados por la Junta de Andalucía.
Aunque en público algunos acallen sus discrepancias, en Marinaleda, no todos están de acuerdo con el control exhaustivo ejercido desde el Consistorio, donde todo lo decide el alcalde. Los concejales de IU se defienden con “el trabajo se reparte y da para vivir”, “cuando hay jornales se hace una asamblea, el que quiere viene”. Mariano Prados, concejal del PSOE en la oposición, acusa a Sánchez Gordillo de gestionar las cooperativas "como le da la gana", de obligar a la gente a ir a asambleas y huelgas para lograr trabajo, peonadas o casa, de hacer chanchullos abusando de su mayoría absoluta, de engañar a la gente, de amedrentar a quienes piensan distinto... "La gente tiene miedo a perder el trabajo, por eso le votan". La respuesta del Alcalde es la siguiente: "¿Qué van a decir? Ven que todo va bien, que la lucha funciona, y algo tienen que criticar. Todo lo que dicen es mentira". Eso sí, es conveniente estar al tanto en el pago de la cuota al SAT.
No todos los habitantes de Marinaleda están de acuerdo con las agresiones sufridas por los trabajadores de las empresas sometidas a las manos de los sindicalistas del SAT
Sus detractores dicen que las asambleas sólo sirven para aplaudir, y que han sumido al pueblo en el atraso, sin industrias, sin negocios, sin alternativas. Apenas existen tres bares, dos restaurantes y alguna pequeña tienda. El polígono industrial está vacío y, desde 2004, no suele conceder licencias para la implantación de empresas, y quien pretende montar un negocio puede esperar más de cinco años y no conseguir la licencia de apertura, sea un bar, una sala musical o cualquier tipo de negocio. No conceden las licencias; pero, eso sí, les cobran puntualmente los impuestos municipales correspondientes a su actividad. Es habitual que se les solicite la entrega gratuita de parte del terreno sobre el que se quiere construir o montar el negocio. Se cruzan denuncias de presión, represión y agresiones. Y quienes estudian acabarán marchando del pueblo, pues “para ir al campo para qué van a estudiar”.
Acciones de pillaje programadas que están siendo imitadas en otros lugares, si bien diversas ONG han rechazado quedarse con el producto de tales rapiña y dar cobertura, así, a una propaganda política sustentada en actividades delictivas. En una de esas acciones en la provincia de Cádiz, el 28 de agosto, al camarada Sánchez Gordillo le chorizaron el teléfono IPhone, que dispone como parlamentario, cuyo robo denunció en la comisaría de la Policía Nacional en Cádiz.
Medio en broma, medio en serio, páginas en Internet, próximas a IU y a Marina Geli, se preguntan ¿Qué nos ponen en el agua?, y sospechan “que están mezclando algún tranquilizante en el agua”, porque “Si no, no se entiende que las calles no sean una protesta múltiple, insumisa y continúa; que aguantemos con tanta calma los retrocesos de decenios (o pronto un siglo) en derechos de ciudadanía y de civilización”.
¿Qué imagen transmite la delación, la manipulación y la falsedad nacionalista o el pillaje del profesional de la revolución en estos momentos de profunda crisis? Ni una imagen aceptable, ni unas ideas coherentes. Por eso, si todas las ideas del PSOE son las de Alfredo Pérez Rubalcaba o de la portavoz parlamentaria Soraya Rodríguez, ¡apaga y vámonos! Si las ideas de IU son las de Caya Lara, las de Gaspar Llamazares o las de Sánchez Gordillo, ¡apaga y vámonos! Si las ideas de UGT son los tópicos periclitados de Cándido Méndez, ¡apaga y vámonos! Si las ideas de CCOO son las economicidades de Fernández Toxo, ¡apaga y vámonos! Con ese bagaje, a principios del pasado julio, Méndez y Fernández Toxo se reunieron de forma secreta con la canciller alemana Ángela Merkel en un encuentro promovido por Michael Sommer, dirigente de la Confederación Sindical alemana (DGB), que, en junio de 2010, fue elegido presidente de la Confederación Sindical Internacional.
Cualquier manual de Teoría Económica reseña que cuando la teoría no está de acuerdo con la realidad, la teoría se va al carajo. Aquí y ahora, es evidente que el determinismo mecanicista de las ideologías se muestra incapaz para definir y proyectar algo hacia el futuro, para interpretar debidamente la realidad y resolver algo. Eso sí, las ideologías sirven para discursear y poco más. Sin duda, todo el mundo tiene derecho a engañarse; pero, otra cosa es tratar de engañar a los demás.
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