Preparando el Octubre Electoral en Cataluña, cambio en el ICS

La maquinaria electoral de los integrantes del pacto que apoya al Gobierno de Artur Mas ha entrado en funcionamiento. Imprentas, agencias de publicidad y toda la parafernalia habitual se ha puesto en marcha.

Carles Constante, es el nuevo agraciado de la pedrea que representa la Presidencia del ICS

Como aperitivo, el cambio de Presidente del ICS. Al Dr. Joan Viñas Salas, cesado por haber sido designado presidente de la Real Academia de Medicina, le sustituirá Carles Constante, desde 2011 director general de Regulación, Planificación y Recursos Sanitarios de la Generalitat, cargo al que acumulará el de Presidente del Instituto Catalán de la Salud (ICS), nombrado por el gobierno interino de la Generalitat. Como vicepresidente continuará el presidente de la sectorial del partido de CDC, Francesc Sancho. ¡Todo queda en casa! Dos personas favorables a la sanidad privada y a la territorial concertada.

El 11 de julio de 2012, en Manostijeras y Apandadores, decíamos: “En su improvisación, la Generalitat ofreció el cargo a Joan Roig, el preferido de Josep Prat, a Josep M. Padrosa y a Roser Fernández, secretaria general en el departamento de Boi Ruiz. Sin límite moral alguno, el Govern ha buscado una cabeza de turco para quemar ante la opinión pública y para que deje libre una institución en la que, posteriormente, situar a un prohombre de CDC. El partido que acogió el montaje de la tragedia sanitaria catalana de la tripartida la ha derivado hacia la farsa más grotesca, donde los malandrines entran y salen de la función a su antojo, saltándose el guión que les obligaba a actuar secundum legem, y convirtiéndose en protagonistas del contra legem".

Con el carné de CDC en la boca, y las manos libres, Carles Constante se ha caracterizado por el inmovilismo de su obediencia nacionalista llevada a la máxima expresión por su condición de miembro fiel del aparato. Hasta ahora no se ha caracterizado por matizar ni aportar nada relevante, salvo sobrevivir a las opacas triquiñuelas de sus mandos políticos. No se espera de él oposición a los nuevos recortes en la sanidad que se preparan en los futuribles presupuestos.

CDC avanza un paso más en la dirección totalitaria con la confusión de administración con el partido, y del partido con la autonomía. Benito Mussolini tuvo idéntico confusionismo. Al menos, Mussolini no tenía embargada por la Justicia la sede de su partido.

El lapsus de Artur Mas es ya monumental, habló del gobierno de los mejores cuando quería decir de los más obedientes y sumisos. Artur Mas ha sobrepasado, incluso, a José Luís Rodríguez Zapatero, un listón tan alto que era casi imposible de superar. Cero por cero igual a cero.

¡¡¡Ah!!! Con la emoción del cambio de presidente, se me olvidaba mañana concentración a las 8 horas en el vestíbulo del Hospital Joan XXIII de Tarragona.