El Parlament de Catalunya, pitorreado y miccionado. (IV) Que pasen Marta, Oriol y Pere

Cada una de las intervenciones de los hermanos Pujol Ferrusola fue una muestra más de la consideración que tiene el “Klan” por el Parlament de Catalunya y sus Comisiones de Investigación.

Jordi Pujol Ferrusola con su Lamborghini Miura en una estación de servicio en Puigcerdà el domingo 8 de marzo, donde pagó con billetes de 100 €, según El Periódico. El viernes paseaba por el sur de Francia.

Días después de contar milongas en el Parlament, el viernes 6 de marzo de 2015, Jordi Pujol Ferrusola volvía a las andadas. En una carretera cercana a Puigcerdá, la policía francesa retuvo el Lamborghini de matrícula B-7827-WG, que conducía el primogénito del “Klan Pujol”. En una inspección ocular del vehículo, los agentes comprobaron la existencia de un paquete que contenía 10.000 euros, cantidad límite que, sin declarar, se puede sacar de España.

Innegablemente, ni los padres ni los hijos del “Klan” pueden ser creíbles con sus continuas mentiras. Lanzaron el lema de espanyansroba cuando ellos llevaban cuatro décadas espoliando Cataluña.

La digital Marta Pujol Ferrusola

En su interpretación ante el Parlament de Catalunya, la segunda hija del “Klan”, Marta Pujol Ferrusola, ironizó que se podría hacer una comisión de investigación sobre la amistad, tras asegurar que "Yo sí que no soy amiga personal de Mas".

Marta fue la primera en declarar en la sesión de 2 de marzo de 2015, y se inició con fuerza: ''De los 12 contratos que firmé con el Gobierno catalán, sólo el último fue a través de concurso''. Con su título obtenido en 1987, admitió que, entre 1988 y 1997, encadenó de la Generalitat, once contratos “a dedo” y uno más en “proceso restringido” cuando su padre era el presidente. Argumentó que eran contratos “según la legalidad vigente”, que compaginó con su trabajo como arquitecta de los ayuntamientos de Sant Andreu de Llavaneres (Barcelona) y Sant Vicenç de Montalt (Barcelona). Sin someterse a concurso público, en 1987 ya tenía un puesto de arquitecta en Sant Andreu de Llavaneres (Barcelona).

Explicó que, en 1996, gobernando CiU-ERC en Sant Vincenç de Montalt, "Me vinieron a buscar porque necesitaban un arquitecto, me hicieron una entrevista y me contrataron", ocupando una plaza de funcionario técnico superior de ingeniería, por asignación directa, sin que se celebrara ningún proceso de selección. Marta dice que fue un servicio de consultoría externa. Una práctica habitual en ayuntamientos de menos de 10.000 habitantes –aseveró, aunque, en su caso, con un sueldo de 2.264 euros al mes por un trabajo de nueve horas semanales, cuando el alcalde tiene asignado 1.137 euros mensuales con una dedicación del 50% y el primer teniente de alcalde, 1.696 euros con dedicación plena. El resto de concejales cobran dietas por asistir a los plenos. Un contrato de 10 años, prorrogable por cuatro años, pero que aún la mantiene vinculada a ese Consistorio, tras la última oferta del ayuntamiento en 2009. En la actualidad gobierna CiU con el apoyo del PSC.

Marta Pujol Ferrusola y el president de la Comisión, David Fernández

Comentó que ha trabajado con corporaciones municipales de "todos los colores": mayorías absolutas de CiU, gobiernos de ICV, tripartitos y del PP. A preguntas de los diputados, se mostró muy molesta porque "En todos estos años nadie ha puesto en duda mi labor profesional; otra cosa es que ahora se haga una campaña por otros motivos". Sin embargo, Marta Pujol Ferrusola se queja de que sus apellidos le han perjudicado, sin cuestionar ninguno de los beneficios obtenidos por ser hija de su padre, pero espetando que ''Soy una víctima beneficiaria”. No obstante, nunca dijo NO a los encargos que se le ofrecieron por esa vía.

Con su padre en la presidencia de la Generalitat, Marta Pujol realizó, entre otros, estos trabajos:
• Estudio sobre la modificación de las normas subsidiarias en la Cerdaña;
• Promoción de 102 viviendas en Calella;
• Promoción en Calella de otras 72 viviendas;
• Promoción en el municipio de Blanes;
• Arquitecta de un centro de atención primaria (CAP) en Sant Cugat del Vallès;
• Arquitecta de un centro para ancianos en Vilafranca del Penedès;
• Arquitecta en un centro asistido en Barcelona;
• Arquitecta en un CAP en Llavaneres;
• Arquitecta de un archivo en Manresa;
• Arquitecta de una escuela en Lliçà d'Amunt;
• Proyecto de un centro cívico en Sant Vicenç de Montalt, siendo la arquitecta municipal de esa misma población. Trabajo que dijo no era incompatible con su cargo municipal.

En su defensa, Marta Pujol Ferrusola, expuso que en su despacho siempre se trabajó mucho más para el sector privado y que, pese a que en esos años había mucha obra pública, sus contratos con la administración sólo representaba un 20% del volumen de negocio. Lamentó que, ya en 1999, varios grupos del Parlament le habían exigido explicaciones por sus relaciones con la Administración Pública. No obstante, sobre este tema, ironizó que "Pensaba que ya había quedado lo bastante debatido". Aseguró que, para lograr esos contratos, nunca se entrevistó con consellers de la Generalitat y defendió su búsqueda de encargos y contratos "repartiendo tarjetas".

Negó que conociera el contenido de la confesión de su padre antes de que la hiciera pública, pero sí conocía la existencia del legado tras morir su abuelo, Florenci Pujol, en 1980, cuya gestión estuvo entonces en manos de Delfí Mateu. Señaló que "Era el legado de mi abuelo. Nos lo dejó y ya está, era su dinero", y "No quisimos saber nada más. Estaba por si un día se necesitaba para afrontar situaciones de poca estabilidad" y, sobre el origen del dinero, remitió a las explicaciones de su padre. Su abuelo les comentó que tenía dinero para ayudarles, si lo necesitaban, en alguna ocasión. Dijo ignorar su origen y que desconocía el momento en que se abrió la cuenta y la cantidad inicial. En 1992, su madre y el resto de hermanos abrieron una cuenta en la que se les depositó el total del legado: unos 62 millones de pesetas para cada uno. Subrayó que ella ha tenido una actitud financiera conservadora, limitada a movimientos de acuerdo con las recomendaciones del banco, sin aportar capital extra alguno. Su cuenta está en dólares y su importe depende la cotización de esa divisa. Afirmó que "Cada cuenta la gestionaba el titular de cada cuenta y cada uno hace del legado recibido lo que considera". Reconoció haber ido una vez a Andorra para "esquiar y sin maletas -con dinero-, sin metralletas, ni tanques, ni pistolas". Una vez al año viaja a Andorra, sin su madre, para gestionar la cuenta y que sólo, ocasionalmente, ha retirado dinero, con lo que el capital inicial permanece inalterado.

Marta Pujol Ferrusola, como sus padres y cinco más de los siete hermanos, se encuentra imputada por diversos delitos económicos como fraude fiscal y blanqueo de capitales por la fortuna oculta en el extranjero. Marta manifestó que no se acogieron a la amnistía fiscal anunciada por el ministro Montoro por ''miedo a que no se respetara el anonimato''.

El pasado 27 de enero, Marta Pujol declaró como imputada ante la juez de Barcelona que investiga la fortuna de su familia y señaló que era su hermano Jordi el encargado de gestionarla y de invertirla. La misma versión mantuvo Pere Pujol Ferrusola.

Oriol Pujol y sus contactos

Sintiéndose escoltado por la plana mayor de CDC desde el público, y mostrándose especialmente amable con Artur Mas, explicando que: ''Es en los años de oposición donde Artur Mas pasa a ser el 'president' Mas. Nadie le ha regalado nada''.

Aseguró que cumplió con sus obligaciones como número dos de CDC, como diputado, y presidente de grupo parlamentario de CiU en el Parlament. Justificó, por sus cargos, su propuesta de muchas cuestiones, pero "en el terreno de proponer no está la capacidad de decidir". Negó tratos de favor en su carrera política y basó en sus méritos su ascenso partidario: "Mientras he hecho política mi padre era el president, no mi padre”. “Si no creen a mi padre, es su problema”.

No obstante, se reservó la posibilidad de no responder a algunas cuestiones al no ostentar ningún cargo público en la actualidad. 'Yo ya no soy diputado y no tengo responsabilidades políticas' –recordó a los presentes.

Oriol Pujol Ferrusola camina junto a David Fernández, que preside la "Comissió Pujol"

En la comparecencia más esperada en la sesión del lunes 2 de marzo, los miembros de la Comisión le preguntaron al ex diputado Oriol Pujol sobre sus imputaciones por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), en marzo de 2013, por los delitos de cohecho y tráfico de influencias en la causa de las ITV en beneficio propio y de empresarios de su entorno. Manifestó no tener voluntad alguna de "disponer, participar ni poseer" una estación, y negó haber acordado con Sergi Alsina la creación de una empresa de ITV, y aseguró que quien, legítimamente, podría haber tenido estos objetivos son terceras persones pero no él.

Como antiguo secretario general de Industria de la Generalitat, respondió: "Si me preguntan si mi intención era acceder o no a una estación de ITV, mi respuesta es no: ni solo ni acompañado", Defendió su gestión en la compra de Ficosa de la planta de Sony en Viladecavalls (Barcelona) para mantener sus 950 puestos de trabajo. Además, se desmarcó del nombramiento de Josep Tous como encargado de la Generalitat para pacificar el sector de las ITV, señalando que la figura del intermediario ya existía durante el tripartito.

Los indicios señalaron que, a través de su esposa, Anna Vidal, también imputada, camufló los cobros de la trama de ITV como trabajos inexistentes de su mujer a cambio de utilizar sus influencias políticas y votar en el Parlament a favor de sus intereses. En el mes de julio de 2014, esas imputaciones truncaron su carrera política y forzaron su dimisión como secretario general de CDC, delegando sus funciones en Josep Rull y Lluís Corominas.

Perdida su condición de aforado, tras renunciar a su escaño por nuevas imputaciones, la causa volvió a sustanciarse en el juzgado de instrucción número 9 de Barcelona del que procedía y se unificó con otra investigación que estaba en ciernes y que, el pasado mes de diciembre, comportó su tercera imputación por cohecho. La juez sospecha que Oriol Pujol cobró comisiones para beneficiar proyectos de un empresario amigo, el también imputado Sergi Alsina, entre ellos las deslocalizaciones de empresas radicadas en Cataluña como Sharp, Sony y Yamaha, a través de las facturas que su esposa giraba por trabajos de asesoramiento inexistentes. Sobre el tráfico de influencias que representaría esa intermediación dijo que "La respuesta es no. No me he lucrado en ninguno de estos procesos". “Yo no he cobrado por hacer de contratista con algunas empresas y mi partido no ha recibido ninguna donación para hacer favores a empresas”. Reconoce que medió para ''garantizar la ocupabilidad''. Aseguró que su mujer, Anna Vidal, fue quien cobró por su trabajo profesional de asesoría en esas operaciones. Negó que Alsina realizara un pago de medio millon de euros a su esposa indicó que "El trabajo de mi mujer no es ficticio. Es abogada y máster de Esade" y ''Mi mujer hizo unos trabajos y se acabó. Es una profesional que hace 25 años que ejerce en este país'.

La Fiscalía sostiene que Anna Vidal facturó a la empresa de Alsina por un asesoramiento "ficticio" limitado a "ocho hojas manuscritas con apuntes y referencias sobre las empresas candidatas, noticias de prensa e informes sobre las empresas recogidos de internet", que encubría las comisiones a Pujol por proporcionarle contratos a través de sus influencias políticas. Dos trabajadores de Alsina declararon ante el juez, del Juzgado de Instrucción núm. 9 de Barcelona, que, en el momento del asesoramiento para las deslocalizaciones, Anna Vidal era desconocida en su empresa. La fiscalía detalló en un auto del caso de la deslocalización de Sharp, que la multinacional contrató a Alta Partners por 3,2 millones de euros, para que le asesorara en la búsqueda de compradores para sus instalaciones en Cataluña.

El ex diputado Oriol Pujol, denunció la existencia de una campaña, de un “juicio político” contra el “Klan”, aseverando que la conveniencia de las informaciones contra los Pujol: ''Coinciden en el tiempo con el proceso soberanista''. Sacó a relucir a Monedero diciendo que "No creo que lo que le pasa al señor Monedero sea casual". Introdujo en su defensa el “caso Mercurio”, que utilizó como ariete de ataque contra el PSC por presunto tráfico de influencias de su ex secretario de organización, Daniel Fernández, y del ex dirigente socialista Manuel Bustos, ex alcalde de Sabadell.

También, mencionó al “pequeño Nicolás”, con quien accedió a reunirse, declarando que éste conocía "alguna conversación que no consta en el sumario" de las ITV y tenía conocimiento de comidas y encuentros que no habían trascendido. Asegura Oriol que “el pequeño Nicolás”, que insistió que no acudiera con su abogado, le presentó una carta “no formal” de la vicepresidente del Gobierno y del ministro del Interior, y que le mencionó “con nombres y apellidos" a miembros de la Policía Nacional, muchos de ellos apartados del cuerpo e imputados en un juzgado de Madrid.

Tampoco consideró una casualidad que, en marzo de 2011 en un hotel, la líder del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, le preguntó con toda "naturalidad" por unas facturas del caso ITV y por la profesión de su mujer, Anna Vidal, sin que se hubiera levantado el secreto de sumario en el que sería imputado.

A la espera de que su hermano Jordi declare ante el juzgado de Barcelona que investiga de forma “incipiente” la causa del legado de su abuelo, se negó a declarar ante la Comisión, afirmando su transparencia fiscal y asegurando que "No tengo dinero en el extranjero y no he regularizado nada porque no tengo nada que regularizar". Sin duda, ante la insistencia de los diputados, Oriol Pujol dio una explicación que chocaba con la revelación de su hermana Marta sobre esta cuestión y que contradecía las declaraciones de su padre y de su hermano Jordi. ¿Pérdida de memoria o de coherencia?

Capote de David Fernández y de ERC a Oriol Pujol

El portavoz popular, Sergio Santamaría, citó a la Fiscalía para indicarle que: “Hay indicios que se ha podido perpetrar una actividad delictiva, otra cosa es que usted lo niegue”. Santamaría le recriminó que todos sus hermanos hayan hecho carrera vinculados a la Generalitat

El president de la Comisión, David Fernández (CUP), volvió a echar un capote a un miembro del “Klan”. En este caso a Oriol Pujol, enfrentándose a Sergio Santamaría, portavoz del PP en la "Comissió Pujol" en la imagen

El presidente de la comisión, David Fernández (CUP), tras las intervenciones del diputado popular, precisó que no es lo mismo “trabajar” en la Generalidad que tener “contratos” con la Generalidad. El diputado popular le replicó al líder de la CUP que no le diga cómo debe llevar su interpelación. El diputado cupaire añadió que sólo intentaba acotar el sentido de la pregunta y le ha pedido concreción a Santamaría, quien ha protestado por la actuación del presidente de la Comisión. Tras varias réplicas y contrarréplicas, David Fernández le retiró la palabra argumentando que se había acabado el tiempo, ya que había consumido más de nueve minutos en su turno y el límite fijado era de siete. Santamaría pidió “flexibilidad”, porque se trataba de una comisión “importante”, y porque “ustedes [los diputados de la CUP] también piden siempre flexibilidad”. David Fernández, en una muestra de tensión verbal extrema, amenazó con suspender la sesión, llegando a decir: “arreglamos esto usted y yo”. ¡Esto sí que es dialéctica, la dialéctica de las sandalias y de las samarretes! ¿Una interpretación de palo y tentetieso de un lacayo o de un guardaespaldas? ¡Ay, pena, penita, pena!

Posteriormente, el diputado de ERC, Sergi Sabrià, presidente de la comisión de asuntos institucionales del Parlament, recriminó a Santamaría que la presidenta del PP catalán, Alicía Sánchez Camacho, no se presentara ante su comisión por el caso de escuchas a políticos de la agencia de detectives Método 3. Santamaría defendió de las “calumnias” a su compañera de partido explicando que siempre había estado dispuesta a “colaborar”. En este momento, David Fernández (CUP) le volvió a cortar, amenazando por segunda vez con suspender la sesión y pidiendo al diputado popular que no hiciera “debate”.

Carlos Carrizosa, portavoz de Ciutadans, se dirigió a Oriol Pujol con estas palabras: ''Es usted un ejemplo de lo que es estar en política para forrarse a través de sus influencias''. Indicó que Jordi Pujol Ferrusola era quien “llevaba” los negocios y Oriol Pujol quien aportaba "los contactos políticos". Incidiendo en que ''Muchos pensamos que el dinero de los Pujol viene de esta simbiosis''.

Pere Pujol Ferrusola, ¿futuro pobre de solemnidad?

El último en comparecer en esa sesión fue Pere Pujol Ferrusola, también imputado ante la juez de Barcelona que investiga los fondos ocultos y que, en su declaración del pasado 27 de enero, precisó que su hermano Jordi le no dio explicaciones sobre las cuentas ocultas hasta 1992. Sostuvo que la consecuencia del impacto de la confesión de su padre le augura un futuro en que no tendrá “ni cinco”; pero, es una situación que no sufren ahora ni él ni sus hermanos. Pero, algunas personas argumentan cosas absurdas para echarse atrás y conseguir contratos se le hace difícil "por la crisis y por esta situación".

Defendió la comparecencia de su madre, Marta Ferrusola, pero advirtió que su frase sobre ellos conforme van “con una mano delante y otra detrás”, "Fueron palabras poco afortunadas. No estoy con una mano delante y otra detrás. Sí que puede que, a partir de ahora, tenga 'menos cinco”. Si bien, su madre hablaba por el global de la familia y algunos de sus miembros tiene una situación profesional “complicada”.

Pere Pujol Ferrusola, en la imagen, junto a Marta y Oriol, que comparecieron en la misma sesión ante la "Comissió Pujol"

Se definió como persona muy activa y que responder a las preguntas de los diputados que cuestionan su actividad profesional le resultaba “incómodo”. Resaltando que "Si yo no estoy acostumbrado, imagínese mi madre, con 80 años, fuera del circuito político desde hace años y ante sus preguntas insistentes".

Sobre el patrimonio oculto en Andorra, admitió que, visto con perspectiva, "Quizá sí tendríamos que haber ido a la amnistía" fiscal, porque "Es obvio que durante una época se ha defraudado a Hacienda". Máxime, cuando no acogerse a la amnistía fue una “animalada” y que el coste de la regularización posterior ascendió entre el 40% y el 50% del dinero defraudado. Sin embargo, crítico que "una familia española muy famosa" regularizó fuera de plazo y no se les aplicó el 40% como a la familia Pujol, sino el 10% como si hubieran regularizado durante el periodo de la amnistía fiscal.

A una pregunta de la diputada de la CUP, Isabel Vallet, declaró que "No somos un clan. Somos una familia bien avenida". Prueba de que no son un “clan” para cometer irregularidades, es la diversidad de las ocupaciones de cada hermano, que “se ha espabilado” por su cuenta y no trabajan en un mismo sector.

No se preocupen que el festival no acabará aquí, aún queda alguna comparecencia de miembros del “Klan Pujol” como Mireia y Oleguer.